Para más información pinchad en la foto

Para más información pinchad en la foto
PIncha en la imagen para nuestra lista en Spotify. Buena música americana para conducir

lunes, 18 de marzo de 2019

Los coches de George Harrison, el beatle que amaba la F1

El tercer Beattle más conocido tras Lennon y Mcartney fue un gran amante de los deportivos y de la F1, tanto fue así que llegó a pilotar algunos monoplazas.

Los coches de George Harrison eran la envidia del vecindario en Oxfordshire (Inglaterra). Y no me extraña porque en el garaje de su chalecito adosado (mansión Friar Park) llegó a acumular más de cien juguetes entre Aston Martin, Jaguar, McLaren, Ferrari o Mercedes entre otros muchos. 


De los cuatro integrantes del conjunto de Liverpool, George Harrison fue el más apasionado por el mundo del motor. Pero no solo coleccionaba deportivos como si fueran cromos, sino que también le apasionaba la competición, especialmente la F1.

Tanto es así que asistía con frecuencia a los Grandes Premios del Mundial, donde era habitual verle charlar por el paddock con los mejores pilotos de F1, como Ayrton Senna. Incluso con algunos de ellos, como fue el caso de Emerson Fittipaldi, llegó a trabar una gran amistad.

También con su compatriota James Hunt, uno de los pilotos más fiesteros del Gran Circo y enemigo en la pista del gran Nikki Lauda, solía conversar en los circuitos.

Uno de los primeros coches de George Harrison fue un Ford Anglia 1955. Está claro que compró este vehículo antes de su éxito. Éste fue el primero de una gran colección.


Cuando el negocio de la música empezó a dar sus frutos, Harrison cumplió uno de sus sueños. Uno de los primeros se llamó Jaguar E-Type, con el que posó en 1964. 


Como buen británico y ya como una estrella del rock, se decidió a ampliar su camada con un imponente Aston Martin DB5 1965.  


Por otra parte, recuerda que en los años 60 se llevaba mucho la temática psicodélica, como en el caso del famoso Rolls de John Lennondel que ya hablaremos como ejemplo de lo estrombótico y mal gusto. Y claro, Harrison se apuntó a la moda con este Mini 1966 que aparecía en la película Magical Mystery Tour.


Por otra parte, recuerda que en los años 60 se llevaba mucho la temática psicodélica, como en el caso del famoso Rolls de John Lennondel que ya hablaremos como ejemplo de lo estrombótico y mal gusto. Y claro, Harrison se apuntó a la moda con este Mini 1966 que aparecía en la película Magical Mystery Tour.


Después se agenció este Ferrari Dino 246 GTS que disfrutó desde principios de los 70. Como muchos artistas de la época, mucho rollito hippie, budista y antisistema, pero este señor vivía como un capitalista de tomo y lomo.


En su espacioso garaje, George encontró espacio para una bestia de los 80: el Mercedes-Benz 560E AMG 1986. Por cierto, cuando se cansó de él, se lo cedió a su amigo Jeff Lynne, vocalista de la E.L.O. Ya sabéis, si alguno tiene alguna máquina de este tipo y se ha aburrido de él, aquí tenemos espacio y ganas de cuidarlo.


Ya algo más mayor subió el listón y empezó a comprar coches únicos, como  este McLaren F1. Según cuenta la leyenda, lo construyeron los chicos de Woking para él. Siguiendo con los cotilleos, ¿sabías que su ex amigo Eric Clapton, además de conquistar a su esposa Pattie Boyd,  también quiso levantarle este deportivo? Cosas de artistas.


Por último, para no aburriros más con toda la colección os dejo el Porsche 930 Turbo, uno de los “carrera” más divertidos de conducir.



Harrison y las carreras de coches

Como decíamos al principio, George Harrison fue un apasionado de los monoplazas y no dudaba en cambiar la guitarra y el micrófono por el casco y los guantes para darse unas vueltas en algún bólido. Como por ejemplo a los mando de este Lotus 18 del 61 pilotado en Donington 1979.


Enamorado de la velocidad, era un asiduo participante del Festival de Goodwood. En la edición de 1993 participó con un bicho artesanal denominado Light Car Company Rocket 343 kilos, motor de una Yamaha de 1070cc y 171 caballos. Un verdadero juguete hecho sólo para correr y divertirse.  











No hay comentarios:

Publicar un comentario